¡No te rindas!

 ¿No encuentras nada de tus tatarabuelos en FamilySearch? No te frustres: esto es lo que puedes hacer

A veces buscamos en FamilySearch y… nada. Ni una coincidencia, ningún registro, ningún dato claro de nuestros tatarabuelos. Pero eso no significa que todo esté perdido. La genealogía también es estrategia, y aquí te cuento qué pasos puedes seguir para desbloquear esa línea familiar.

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🔍 ¿Por qué no aparece nada?

Hay varias razones por las que podrías no encontrar registros de tus tatarabuelos:

• No estás buscando con los datos suficientes (lugar o fecha inexacta).

• El nombre fue mal escrito o mal indexado.

• No se han digitalizado los registros de esa parroquia o municipio.

• La búsqueda es demasiado específica.

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📌 ¿Qué puedes hacer?

1. Revisa lo que ya sabes

Vuelve a hablar con tu familia, repasa fotos antiguas, partidas físicas o cartas. Cualquier dato puede darte una pista nueva: un lugar exacto, una fecha aproximada, una profesión, un segundo apellido.

2. Amplía la zona de búsqueda

Quizás estás buscando en un pueblo concreto, pero los registros podrían estar en la parroquia del municipio vecino.
🗺️ Prueba buscar en pueblos cercanos, toda la comarca o incluso la provincia entera.

3. Reduce filtros y prueba combinaciones

En FamilySearch:

• Prueba con solo el nombre y un apellido.

• Haz búsquedas sin poner fechas.

• Cambia el orden o combinación de los apellidos.

• Intenta buscar a los hijos o nietos, por si hay alguna pista sobre los padres.

4. Busca con datos indirectos

¿Sabes cuándo se casó un hijo o cuándo nació un nieto? Con esa información puedes estimar la edad y la época de vida de tus tatarabuelos, y así enfocar mejor la búsqueda.

5. Consulta otras fuentes

Si en FamilySearch no aparece nada, busca en:

• Archivos parroquiales directamente (en persona o por correo)

• Archivos diocesanos o históricos

• Otras webs de genealogía (MyHeritage, Ancestry, Geneanet…)

• Archivos municipales o provinciales (padrones, censos, catastros)

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🧭 En genealogía, lo último que se pierde es la esperanza

No encontrar a tus tatarabuelos no es el final del camino. Es simplemente una señal para revisar la estrategia, buscar otras fuentes o reinterpretar los datos.

Y no lo olvides: tienes 8 tatarabuelos. Aunque no encuentres a uno, es muy probable que con otro sí puedas avanzar. Cada línea familiar te abre nuevas puertas.

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📌 ¿No sabes por dónde seguir?

Cuéntamelo en comentarios o envíame el nombre y los datos que tengas. Quizás entre los dos damos con el siguiente paso.